El Real Madrid consigue su pase a semifinales de la Copa del Rey gracias a las dos victorias cosechadas ante el Atlético de Madrid. Los hombres de Mourinho se presentaban en el Vicente Calderón con los deberes hechos en la ida y con cierta parsimonia en los primeros minutos del partido. A diferencia de lo que debería haber sido, el equipo colchonero no dio síntomas de poder dar la vuelta a la eliminatoria en ningún momento del partido, viéndose superado por la propia ansia que se traducía en varias ocasiones fallidas en el área de Casillas.

Cristiano termina con cualquier esperanza

En el minuto 13, un despiste del portero madridista podría haber supuesto el primer gol atlético, pero la suerte no acompañó, una vez más, a los de Quique Sánchez Flores que vieron cómo la acción se quedaba en un mero susto para la zaga merengue que resolvía con eficacia el percance. El ritmo del partido, demasiado lento, tampoco ayudaba al espectáculo que debía verse y que tanto se había vendido en la previa. En el minuto 21, Arbeloa producía una dura entrada a Reyes que provocaba que se retirase del terreno de juego lesionado.

Un minuto después, Cristiano Ronaldo aprovechaba un pase de Sergio Ramos desde la banda al punto de penalti y fusilaba a De Gea. El portugués calentaba aún más el ambiente hostil del estadio mandando callar a los aficionados colchoneros, tal y como hizo en su día Raúl en el Camp Nou. Aún así, los cánticos que tanto indignaron al madridismo en contra de Mourinho se repitieron. Lamentable.

Con los ánimos acelerados

El gol en contra provocó más dureza en el juego. Las faltas se sucedieron una tras otra, impidiendo que el poco juego que se había visto, siguiera. Cerca de la media parte, Diego Costa intentaba acortar las distancias antes del descanso con un pase que se perdía. El Atlético empezaba a perder el norte. Tanto el gol en contra como la baja de Reyes parecen haber hecho mella en el ánimo colchonero. Por su parte, el Real Madrid, muy tranquilo, se paseaba y creaba alguna ocasión que otra.

Sin juego y sin ganas

En la segunda parte, el partido se volvió más aburrido y tosco si cabe. El Real Madrid seguía jugando con la seguridad de quién tiene el pase asegurado, mientras el Atlético despertaba poco a poco mediante ocasiones dispersas como la de Tiago en el minuto 50 que suponía su primer disparo entre los tres palos. Pero este empuje se fue diluyendo a medida que los minutos pasaban, dejando paso al aburrimiento absoluto, a las faltas y a las tarjetas amarillas.

El Real Madrid se verá las caras la semana que viene con el Sevilla en semifinales en el Sánchez Pizjuán.

Quique Sánchez Flores dejó claro que su equipo no se va rendir contra el Real Madrid. Sabe que no será fácil la remontada, pero sus jugadores morirán en el campo por intentar lograrlo. “Rendirse es lo último. No hay que rendirse nunca, sólo cuando te obligue el oponente. Es una de las máximas de la guerra. La pancarta que han colocado los aficionados en el entrenamiento, un atlético nunca se rinde, adelante campeón, es muy acertada. Refleja el ánimo del partido y cuál es la intención”, aseveró.

A la hora de apuntar que espera del encuentro, Quique dejó claro que “me gustaría poner nervioso al Real Madrid. Diría mucho del equipo. Estamos en una situación en la que vamos a intentar hacer nuestro mejor papel. Venimos de un partido aceptable. He visto a mis jugadores tranquilos y muy concentrados. Tenemos el partido en la cabeza y ojalá lo podamos llevar a la práctica en el campo. Tener una arrancada y un sprint de caballo”.

El técnico fue analizando poco a poco el encuentro contra el Real Madrid y dijo que “me imagino un partido más igualado que el del Bernabéu. Será diferente. Los jugadores viven de un estado de ánimo y ellos tienen muy claro el objetivo. Lo intentaremos desde el primer minuto”.

En los últimos partidos, Quique Sánchez Flores ha introducido diversas variaciones en el esquema del equipo. De cara al encuentro contra el Madrid, Quique apuntó que “vamos ajustar el sistema a los jugadores que tenemos. Tenemos un partido en la cabeza y vamos a intentar jugarlo. En cualquier sistema se necesita energía, compenetración, competitivo y llevarlo al límite. Hay varias opciones para sustituir al Kun y le daremos una vuelta en las próximas horas”.

Quique Sánchez Flores sabe que para sus jugadores es un partido especial, al igual que para la afición rojiblanca, por eso explicó que “la plantilla está tranquila. Han jugado encuentros igual e incluso más importante que el derbi del jueves. La afición va a ver un equipo que va a dar su mejor versión. Sabemos que nuestros seguidores nos van a empujar. Con lo que tenemos más su apoyo, podemos lograrlo. El rival es de un nivel máximo y nos lo pondrá muy difícil”.

El preparador rojiblanco quiso dejar claro que el rival del jueves será el Real Madrid y no Mourinho. “No jugamos frente a él, lo hacemos ante el Real Madrid. Mourinho tiene un límite y se queda en la línea dirigiendo a sus jugadores. A partir de ahí juegan los jugadores y ellos son los que deben ser capaces de ejecutar el encuentro que soñamos. Estoy tranquilo, pues los chicos me han dado mil razones para confiar en ellos”.

Con respecto al Real Madrid que espera ver en el Vicente Calderón, Quique aseguró que “me imagino un equipo inteligente. Va a ofrecernos soluciones que sean favorables para ellos. Trampas para caer en la que no debemos caer. Nos puede invitar al ataque y estar pensando en el contraataque que van a realizar. Tienen francotiradores que te la colocan dentro. Jugaremos con intensidad y en la parte del campo que queremos. Lo haremos con intensidad, pero con precaución”.

Finalmente Quique analizó el estado físico de Perea y Tiago y opinó que “hay jugadores que no están al 100%. Tiago hizo un esfuerzo importante ante el Mallorca y aguantó. Perea está bastante bien. Ha estado dos días en cama, pero se encuentra en condiciones. Perea al 80% equivale al 150% de otros jugadores, es muy fuerte”.

"Mañana la vamos a liar". Es el lema del vestuario colchonero de cara al choque de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey. En sus manifestaciones públicas los jugadores rojiblancos se muestran más comedidos pero con las grabadoras apagadas, proclaman a los cuatro vientos su fe en la remontada. Saben que creérselo es el primer paso para conseguirlo. Y no es un brindis al sol. Piensan firmemente que es posible eliminar al Real Madrid.

El lunes, en los últimos minutos del partido ante el Mallorca y a la conclusión del mismo, el Calderón pidió a los jugadores 'testiculina' para dar la campanada. Minutos después, y en sala de prensa, Quique Sánchez Flores aseguró que el mensaje estaba captado. Y ahora, los futbolistas también recogen el guante.

"Va a ser un partido bonito, en casa, con nuestra gente, y vamos a darlo todo para remontar", señala De Gea, quien añade que "vamos a salir a muerte, a luchar y a hacer todo lo posible para pasar". El meta colchonero, que fue aclamado por el Calderón tras detener un penalti ante el Mallorca, ya se ha fijado otra meta: "Sueño con pasar la eliminatoria y dar una alegría a la afición".

Otro rojiblanco de corazón, Fran Mérida, también se percató de la petición de la grada en el mismo terreno de juego. "Lo escuchamos, y ése mensaje de la afición resume a la perfección lo que tiene que ser el jueves. Va a ser un partido duro, pero confío al cien por cien en que podemos sacarlo adelante. Y si no se puede, no irnos casa diciendo que no lo hemos dejado todo dentro del campo", señala el catalán, que vivirá su primer derbi como local, algo que anhelaba desde hace años: "En el Bernabéu ya son especiales, pero en el Calderón lo será cien veces más", sostiene, antes de volver a dejar claro que la remontada es posible. El centrocampista, que tiene opciones de ser titular, ve al Atlético capacitado para dar la vuelta al marcador: "Fácil no será, pero estamos capacitados para hacerlo. Este equipo responde en los grandes días y tenemos que salir con fe".

Los primeros minutos, claves
Tiago, con muchos partidos al límite a sus espaldas, también confía en la remontada. "Estamos en desventaja pero jugamos en casa, junto a nuestra afición y se puede pasar", asegura el portugués, quien cree que el comienzo del encuentro marcará, en buena parte, el desenlace del mismo: "Vamos a entrar con mucha ilusión y creo que sí, que se puede remontar. Va a ser muy difícil pero creo que los primeros minutos serán importantes Debemos entrar bien con el ánimo de que la afición esté con nosotros. Vamos a intentarlo".

Respecto al mensaje del Calderón pidiendo garra, Tiago explica que "¿echarle huevos? Intentamos dar todo siempre. En ese partido, el mensaje que esperamos de esta afición es que nos ayude porque los necesitamos. Claro que sí, lo vamos a dar para conseguir la victoria. Aún más que nosotros, nuestra afición quiere ganar".

También mostró sus impresiones Valera sobre el apasionante choque de mañana frente al eterno rival. Cabeza fría pero corazón caliente es la receta del futbolista murciano para lograr la remontada. "Sabemos que un gol puede llegar en cualquier momento, y eso pondría a la gente loca y estaríamos a un gol de pasar", comenta el lateral rojiblanco, quien no duda en conceder muchas opciones al Atlético de Madrid si es capaz de adelantarse en el marcador. "Se puede. Es difícil, son un gran equipo, pero un gol llega en cualquier momento y entonces será la hora de complicarles la vida", añade.

Por último, Juan Valera está convencido de que la hinchada colchonera creará un clima propicio para que el equipo se vacíe en el terreno de juego en pos de la remontada: "El Calderón estará a reventar, y la motivación será máxima. Vamos a darle la vuelta, todo es posible"

Filipe Luis fue el encargado de atender a los medios de comunicación en la sala de Prensa de la Ciudad Deportiva de Majadahonda. El lateral izquierdo rojiblanco reconoció que le costó conciliar el sueño por esa última jugada ante el Real Madrid en la que una carambola entre él y Domínguez acabó con el gol de Özil que suponía el 3-1 en el partido de ida de los cuartos de final. El brasileño dejó bien claro que “fue un accidente. Duele mucho, a mí me ha costado dormir. Pero todo esto me fortalece y me invita a trabajar más. Soy un jugador de bastante personalidad y sólo pienso en seguir mejorando y en crecer cada día más”.

El jugador rojiblanco apuntó que hay que pensar en el Mallorca, que habrá tiempo de volver a centrarse en la Copa. “El equipo ya ha superado el bache que ha tenido en los otros partidos. Ahora tenemos que pensar en la Liga, en el Mallorca, un equipo complicado pero jugamos en nuestra casa, donde somos fuertes y tenemos que ganar sí o sí. No tenemos que pensar en lo pasado sino en las cosas buenas que hemos hecho esta temporada y tirar hacia delante”.

Respecto a que es el tercer lunes consecutivo que le toca jugar al Atlético, Filipe Luis comentó que “nosotros jugamos cuando nos dicen cuándo tenemos que jugar. Es un privilegio jugar en Primera y poder jugar. Personalmente no me quejo, aunque siempre es mejor jugar en sábado o domingo”.

El rival del partido del lunes es el Mallorca, un competidor por los puestos europeos. “El Mallorca es un equipo muy duro y complicado, que ha hecho grandes partidos contra los equipos grandes. Sabemos que tiene un buen entrenador y con jugadores nuevos que se están acoplando y haciéndolo bien, pero en nuestra casa sólo tenemos que pensar en ganar”.

Considera que el vestuario está bien para afrontar una dura semana en la que habrá tres partidos, dos de Liga y uno de Copa. “Desde que llegué vi que este vestuario tiene ganas de mejorar y cada vez que ha habido un momento de crisis se ha levantado. Nadie quiere perder partidos. No tiramos la Copa, la Copa está súper abierta y no es fácil que nos gane un equipo en el Calderón y menos sabiendo lo que es un partido como el derbi y cómo va a estar de ambiente el estadio. Tenemos muchísimas opciones. Y en Liga también. Tenemos que ganar y estaremos metidos otra vez. Ahora sí, no podemos fallar más”.

El Atlético de Madrid regresó a los entrenamientos con la mente puesta en el encuentro del próximo lunes frente al Mallorca. La derrota contra el Real Madrid está olvidada y ahora los rojiblancos se han centrado en la Liga. La Champions está cerca y los jugadores de Quique Sánchez Flores saben que necesitan la victoria contra el Mallorca para no quedarse descolgado de los primeros puestos.

Tiago y Borja fueron los componentes de la plantilla que realizaron trabajo alternativo al margen del grupo. Ambos se encuentran recuperándose de sus respectivas lesiones y estuvieron con el preparador físico recuperador, Óscar Pitillas.

Fue una sesión en la que los jugadores que fueron titulares frente al Real Madrid realizaron entrenamiento de regeneración en el gimnasio. No estuvieron Mario Suárez y David De Gea que se desplazaron junto al Jefe de los Servicios Médicos del Club, José María Villalón a Fremap para someterse a unas pruebas para el saber el alcance de sus lesiones. Al guardameta, que sufrió un golpe con Cristiano Ronaldo, se le realizó una radiografía que confirmó que no padece ningún tipo de lesión, mientras que Mario Suárez tiene una lesión muscular en el aductor medio.

Al terreno de juego de la Ciudad Deportiva de Majadahonda saltaron los canteranos Vitor, Michel, Joseph, Jiménez y Sito, que se unieron al resto de la plantilla para completar el entrenamiento y comenzar a preparar el encuentro del próximo lunes frente al Real Mallorca.

La sesión, que duró algo más de 90 minutos, se inició con trabajo físico una parte de la plantilla, mientras que los guardametas Joel y Sito trabajaban con el preparador de guardametas, Emilio Álvarez.

Posteriormente los jugadores realizaron juegos de posesión, circuito físico con finalizaciones y ejercicios de defensa-ataque en superioridad numérica. Después la sesión concluyó con un partidillo en un terreno de juego de reducidas dimensiones. Antes de concluir el entrenamiento se tuvo que retirar el canterano Alberto Perea tras sufrir una pequeña contractura.