La afición colchonera ve con buenos ojos la llegada de Luis Enrique al banquillo del Atlético, según se desprende de la encuesta al respecto que esta colgada en MARCA.com. En concreto, casi el 63 por ciento de los votantes apoya su elección como nuevo técnico rojiblanco.

Enrique Ortego desveló ayer en el diario MARCA que Luis Enrique, actual técnico del Barcelona B, será el entrenador del Atlético de Madrid la próxima temporada. Aunque en el club rojiblanco se barajaban otras opciones para el banquillo, como la de Gregorio Manzano, la del asturiano ha sido desde el principio la que más gustaba en la zona noble del Vicente Calderón.

Luis Enrique, que finaliza su contrato con el Barcelona B el próximo 30 de junio, ya había anunciado hace tiempo que no continuaría dirigiendo al segundo equipo azulgrana, con el que ha conseguido unos magníficos resultados en los dos años en los que ha estado de entrenador.

Quique Sánchez Flores, entrenador del Atlético de Madrid, compareció ante los medios de comunicación y explicó los últimos acontecimientos ocurridos en el equipo. “La rutina de trabajo comienza como siempre, nos reunimos todo el grupo en el vestuario para analizar el encuentro contra el Racing. Duró 10 minutos y sólo estuvimos cuerpo técnico y jugadores. A partir de ese instante le cedo la palabra a Forlán. El uruguayo habla durante un rato y posteriormente soy yo el que tomo la palabra y finalmente invito al grupo de jugadores para que tomen la palabra. No la toman y salimos al campo de entrenamiento. Enfadados y molestos por la derrota contra el Racing, pero con la obligación de salir a trabajar y centrarnos en el encuentro contra el Hércules”.

El entrenador rojiblanco siguió hablando y analizó la relación con Forlán. “Es un asunto de suma complejidad. Poco normal, poco natural. Se escapa de la clase futbolística del jugador, que está fuera de toda duda. Yo como director del grupo tengo que tomar decisiones. Situaciones, qué como he repetido en ruedas de prensa, son incomodísimas, aseguró.

Con respecto a las relaciones personales con los dirigentes de la entidad, Quique explicó que “el miércoles hablé con el Presidente de la entidad. Fue una conversación parecida a la de muchos encuentros, en los que el equipo no ha ganado. Una charla que no tuvo ni mayor ni menor recorrido que en anteriores ocasiones. Fue una conversación de respeto”.

Quique también habló del futuro de Fran Escriba y aclaró que “hace seis meses me comunicó que quería entrenar. Llevo siete años trabajando con él y ha decidido emprender su carrera en solitario. Ha dado un rendimiento espectacular al cuerpo técnico. Él se encarga de la parcela estratégica e información del siguiente adversario. Entiendo perfectamente que se sienta capacitado para dirigir un equipo, tras siete años de experiencia con los mejores jugadores. No existe mala relación con Fran Escribá. Es un matrimonio que acaba bien”.

En cuanto a la plantilla que dirige cada día en los entrenamientos, Quique aseveró que “tengo plena confianza y respeto hacia los jugadores porque han sido muchas las situaciones fáciles y difíciles durante estos años y siempre han reaccionado para conseguir los objetivos. Tienen respeto a su entrenador y una gran dedicación. Esto sólo es posible si vamos en una dirección, no hay ninguna duda ni ninguna sospecha”.

“Tenemos muy reciente la sólo es posible si vamos en una dirección, no hay ninguna duda ni ninguna sospecha”.

“Tenemos muy reciente la lección que nos dio la afición hace unos meses. La lleva dando todo el año. Por encima de los éxitos, me quedo con la lección que dieron en la final de Copa. Para nosotros sería un deshonor dar una mala imagen. No lo vamos a hacer”, reflejó.

Finalmente terminó su intervención asegurando que “que no nos ciegue la mala racha de resultados, que ha habido unas cuantas. Hay que hacer el mayor esfuerzo posible para conseguir los mayores puntos y que de aquí al final de la temporada, en 10 días acabemos lo mejor posible y que el equipo termine en Europa".

Hoy se cumple un año de la consecución de la Europa League y las aguas bajan revueltas en el Calderón. Quique y Forlán tuvieron una ardua discusión después del partido ante el Racing que continuó ayer por la mañana en una reunión entre ambos, la plantilla y con la presencia de García Pitarch. Después del encuentro, Forlán se enteró de las declaraciones del técnico en rueda de prensa en las que dijo: "¿La actuación de Forlán? Ha tenido 40 minutos sobre el campo, juzgadlo vosotros". El uruguayo le pidió explicaciones al entrenador y éste se excusó argumentando que las declaraciones estaban sacadas de contexto. Incluso casi llegan a las manos en el autobús rojiblanco. El capitán Antonio López tuvo que separarles.

Antes del entrenamiento de ayer, la agria discusión continuó entre técnico y delantero. Por parte del club estuvo Pitarch, quien no pudo más que presenciar los numerosos reproches que ambos se hicieron durante los 45 minutos que duró la discusión. La plantilla salió en favor de Forlán porque no le gustó que se señalase a un jugador en público. Forlán se siente ninguneado ya que considera que no se le ha tratado con respeto. Por su parte, el entrenador colchonero entiende que Forlán lleva toda la temporada a un bajísimo nivel y por ello decidió en los últimos encuentros retirarle la titularidad. Algo que resultó la gota que colmaba el vaso para el charrúa.

Conocimiento. En el club saben desde hace tiempo la tensa relación entre ambos y están cansados de los egos de los dos, ya que consideran que están perjudicando al Atlético y a la afición. Ahora se cuestionan no haber vendido al jugador y si renovar al técnico a finales de la campaña pasada fue un acierto.

"En el cielo brilla una estrella 'Seve'". Las pancartas de recuerdo a Severiano Ballesteros, el mejor golfista que ha dado nuestro país y uno de los mejores deportistas de todos los tiempos, poblaban las gradas de El Sardinero en un partido en el que los goles se fueron para el cielo. El Racing de Santander-Atlético se convirtió en un homenaje de ambos equipos al de Pedreña; y del equipo rojiblanco a su compañero Juanfran Torres, que ayer por la mañana enterraba a su padre, Juan Torres Lledó.

Antes del encuentro se guardaba un minuto de silencio, y se desarrollaban una serie de actos, en los que participaban niños de la fundación del golfista -los jugadores del Racing portarán hasta final de temporada el logo de esta organización-. Dos fotos de 14 metros del deportista eran colocadas en la grada y los jugadores de los dos equipos salían al terreno de juego con camisetas con la fotografía del que fuera uno de los mejores deportistas de nuestro país. Su tierra, su querida Cantabria le despedía a una leyenda. Tres Open Británicos (1979, 1984 y 1988), dos Masters de Augusta (1980 y 1983) y tres Ryder Cup (1985, 1987 y 1995) contemplan al que ya es un mito.

Los jugadores del Atlético se sumaban a este homenaje y adicionalmente se lo tributaban a su compañero Juanfran. El alicantino correspondía al cariño. "Hoy después de un día triste espero que mis compañeros me den una alegría.VAMOS ATLETI!!!!!!", apuntaba el interior a través de su cuenta de Twitter.

Con dedicatoria
No se llevaban jugados ni diez minutos cuando Mario Suárez abría el marcador para el equipo rojiblanco de un preciso disparo desde la frontal. Por supuesto, se marchaba al banquillo, cogía la camiseta con el dorsal '20' de Juanfran y la besaba en dos ocasiones, mientras el resto del equipo se abrazaba a él. Un gol que se encaminaba al cielo. "¡Muchas gracias Brother! Te quiero mucho y gracias a todos. Nunca olvidaré este gol", respondía Juanfran.

Kennedy, de un soberbio disparo de falta, empataba al filo del descanso. Faltaría más, apuntaba al cielo. Con su inusitada capacidad para meterse en jardines, el Atlético encajaba el segundo nada más comenzar el segundo curso. Rosenberg se aprovechaba de eso que llama 'un tiro en el pie'. Severiano Ballesteros levantaba el puño desde el cielo viendo a su Racing doblegar al Atlético para permanecer una temporada más en Primera

El diario MARCA desvela hoy que Luis Enrique será el entrenador del Atlético de Madrid la próxima temporada. Aunque en el club rojiblanco se barajaban otras opciones para el banquillo, como la de Gregorio Manzano, la del asturiano ha sido desde el principio la que más gustaba en la zona noble del Vicente Calderón.

Luis Enrique, que finalizaba su contrato con el Barcelona B el próximo 30 de junio, ya había anunciado hace tiempo que no continuaría dirigiendo al segundo equipo azulgrana, con el que ha conseguido unos magníficos resultados en los dos años en los que ha estado de entrenador.

La opción del Atlético no era la única que manejaba el míster del Barcelona B. Sus buenas campañas en el filial no han pasado desapercibidas para otros clubes. Sevilla, Getafe y Valencia también habían mostrado interés por hacerse con sus servicios, pero, finalmente, se ha decantado por los rojiblancos.